Senado pide a Rosario Piedra atender los temas que aquejan a la CNDH
Las afores y el nuevo aeropuerto de la Ciudad de México
¿Cuál es la seguridad de las afores si falla el proyecto del aeropuerto en Texcoco?
Se está hablando mucho sobre las
afores y su inversión en la construcción del nuevo aeropuerto
de la Ciudad de México. El gobierno nos dice que no existen problemas, que las
afores están seguras y que el nuevo aeropuerto va a funcionar de maravilla,
¿esto es cierto?
Para responder claramente estas
preguntas se deben conocer qué son las afores y sobre todo, cuáles son los aspectos
técnicos para construir un aeropuerto en el lecho de un lago. Estas son las respuestas.
¿Qué es una AFORE?
Es una empresa financiera mexicana,
especializada en administrar e invertir el ahorro para el retiro y voluntario
de manera segura de millones de trabajadores afiliados al Instituto Mexicano
del Seguro Social (IMSS). Procurando el mayor rendimiento posible durante el
ciclo de inversión de los recursos.
Anteriormente los recursos
pensionarios de los trabajadores afiliados al IMSS eran administrados por esa institución en una sola cuenta colectiva, sin obtener rendimientos.
Posteriormente se crearon las afores (Administradoras de Fondos para el Retiro)
por la ley del Seguro Social (LSS) en mayo de 1996, iniciando su operación en
1997, con la finalidad de ofrecer cuentas personales a los trabajadores y para
que el ahorro generado a lo largo de su vida laboral , pudiera crecer con los
rendimientos generados.
Su funcionamiento está autorizado por
la Secretaria de Hacienda y Crédito Publico y supervisadas por la CONSAR
(Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro).
¿Cómo funciona una afore?
Del salario que recibe un trabajador se le descuenta
una cantidad que junto con otra cantidad que aporta su patrón y otra
cantidad más que aporta el gobierno, se forma un fondo de ahorro (que es su
cuenta individual), el cual lo invierten desde el primer
día y genera un rendimiento. De esta manera, poco a poco va
creciendo el ahorro para el futuro. Además, las afores reciben las aportaciones
voluntarias de todos aquellos trabajadores (afiliados al IMSS o no afiliados al
IMSS) que desean aprovechar los altos rendimientos (intereses) y los
importantes beneficios fiscales que éstas ofrecen.
A la fecha existen 21 AFORES distintas
operando en México, entre ellas:
1.
Actinver
2.
Afirme-Bajío
3.
Argos
4.
Azteca
5.
Banamex
6.
Bancomer
7.
Banorte
Generali
8.
Coppel
9.
HSBC
10. Inbursa
11. ING
12. Invercap
13. IXE
14. Metlife
15. Principal
16. Profuturo
GNP
17. Santander Mexicano
18. Siglo XXI
19. Pensionisste
20. Banorte
XXI
En cuanto al NAICM, son cuatro las afore que participan a través de la Fibra E: Inbursa, Pensionissste, Profuturo
y Banorte XXI, con una inversión conjunta de 13 mil 500 millones de pesos. Las afore sólo participan en 10 por ciento de la inversión, mientras que el
restante 90 por ciento se distribuye entre inversionistas nacionales e
internacionales, fondos institucionales, privados, bancas privadas y
aseguradoras.
Los riesgos del
aeropuerto de la Ciudad de México en el lago de Texcoco:
1. Inundaciones. El Nuevo Aeropuerto Internacional de
la Ciudad de México (NAICM), la obra emblema del sexenio de Enrique Peña Nieto,
esconde numerosos efectos nocivos, uno potencialmente catastrófico: las
inundaciones que afectarían a millones de habitantes del área metropolitana de
la capital del país y del Estado de México.
2. Hundimiento
del suelo. La zona
lacustre tiene una función regulatoria de inmensos volúmenes de agua de lluvia
y drenajes que ha impedido inundaciones de grandes proporciones en el área
metropolitana, pero también es estratégica para evitar que siga el hundimiento
del suelo –que en esa parte es de hasta 40 centímetros anuales y que afectaría
inclusive a la infraestructura del NAICM.
3. La
conclusión es rotunda:
“La construcción del NAICM representa un alto riesgo para la ciudad en términos
de inundación, y es incompatible con la vocación reguladora de grandes
volúmenes de agua de lluvia y drenajes que tiene el vaso del Lago de Texcoco.
Es igualmente incompatible con los servicios ambientales que presta el Lago
Nabor Carrillo como refugio de aves migratorias”.
4. Análisis
de expertos. Los
análisis fueron entregados por José Luis Luege Tamargo, director general de la Conagua
en el gobierno de Calderón, al equipo de transición de Peña Nieto, durante una
reunión celebrada el 18 de octubre de 2012 con funcionarios encabezados por
Gerardo Ruiz Esparza, actual secretario de Comunicaciones y Transportes,
responsable del nuevo aeropuerto.
5. El
costo de la corrupción. “Costó
mil 600 millones de pesos, que se van a ir a la basura!”, revela Luege Tamargo, y explica que
el proyecto contempla construir una de las pistas sobre la laguna de regulación
y la planta de bombeo profunda del sistema “Casa Colorada”, obra que él hizo.
“¡Si cae una tormenta se va inundar todo!”.
6. Asignaciones
a empresas amigas y corrupción.
En México, las obras regularmente son asignadas a empresas de amigos, las
cuales para tener beneficios construyen con materiales más baratos que no
reúnen la calidad requerida, por ello existen puentes que se caen desde su
inauguración o carreteras que no sirven al mes de estar en funcionamiento.
7.
Costos muy inflados. La Secretaría de la Defensa Nacional
(Sedena) construyó la barda perimetral del Nuevo Aeropuerto Internacional de la
Ciudad de México (NAICM) mediante un contrato que le permitió encarecer la obra
89 por ciento y el uso de al menos dos empresas fantasmas.
En la página
de transparencia del aeropuerto se anota que el proyecto de barda perimetral
tenía un costo original de mil 547 millones de pesos, pero tras cuatro
convenios modificatorios el muro se encareció hasta llegar a 2 mil 930 millones
de pesos, lo que significa un encarecimiento de 89 por ciento.
La bitácora de obra obtenida por
Aristegui Noticias detalla que los trabajos iniciaron sin tener un proyecto
ejecutivo, que se cambiaron tramos de la barda mientras se desarrollaban los
trabajos y conforme las necesidades de última hora de empresas proyectistas o
de otras dependencias públicas como Conagua.
8.
Uso de empresas fantasmas para desviar
recursos en la construcción y mantenimiento. EMPRESAS HERMANAS FANTASMA. Mediante una solicitud de
transparencia, el Ejército mexicano entregó una relación de 111 contratistas,
que en conjunto vendieron insumos para la barda por mil 355 millones 938 mil
780 pesos.
Dentro del
listado de empresas destacan dos nombres: Constructora Camino Real del Valle y
Constructora los Cuatro Príncipes.
Las compañías
nacieron con tres minutos de diferencia: el 11 de marzo de 2014, el notario
público 128 de Puebla, Jaime Juárez Hernández, acudió a la Secretaría de
Economía a reservar los nombres. Un trámite lo hizo a las 14:21 horas y el otro
a las 14:24 horas, según documentos oficiales.
El 2 de
octubre de 2014, el mismo notario registró las compañías en el estado de Puebla
y como socios puso a una pareja de jóvenes con residencia en Oaxaca: “Carlos
Alexis” y “Dinoraht Miccel”, de 20 y 21 años de edad.
El joven negó a este medio tener
cualquier tipo de empresa y le sorprendió que sus datos personales figuren en
una compañía de Puebla, pues sostuvo que nunca ha visitado esa entidad.
9. Odebrecht metido en la construcción.
Esta empresa brasileña utilizaba la corrupción como fuente y estrategia para
evitar el pago de impuestos, su líder se encuentra en prisión por los escándalos
del robo a PETROBRAS.
10. Hundimiento de la obra por ser un terreno lacustre. Cuando se construye en el lecho de un lago o de un río, cuando llegan las lluvias o una fuente de agua como ciclón o tornado, el agua recupera su espacio, esto ha pasado en Monterrey, Acapulco y Chiapas, lugares muy afectados por haberse construido en lechos de ríos.
El
peso de los aviones en aterrizajes y despegues van a debilitar las obras.
11. Aterrizajes.
La vida útil en condiciones normales de una rueda es de 400
aterrizajes en invierno y 300 en verano. El calor es el peor enemigo para las
cubiertas (las gomas) porque cuando tocan el suelo en un aterrizaje, pasan en
menos de tres segundos a calentarse más de lo que se calienta el agua cuando
hierve. Durante el tiempo que el avión tarde en realizar esas 400 tomas
(aterrizajes), las ruedas de los aviones grandes pueden recibir un solo
tratamiento de vulcanizado, que es como el recauchutado de las ruedas de los
camiones. Los aviones más pequeños pueden llegar a recibir hasta ocho tratamientos de vulcanizado. Lo peor para una rueda es que se formen grietas en
la goma.
El peso del
avión se multiplica por la fuerza de la gravedad al bajar las ruedas del
avión, soportan un impacto mayor. El primero, el factor tierra, se basa en
que se requiere rodar hacia la pista usando las calles de rodaje
con la autorización y guía del control del tráfico aéreo (Air Traffic
Controller, ATC), contar con una superficie apta para despegar, solicitar al
ATC el permiso de despegue e iniciar con el factor aparato, en el cual influyen
todas las partes del avión; se liberan los frenos, se mantiene el avión
centrado en la pista, y por último se acelera a máxima potencia la planta
motriz de la aeronave para alcanzar durante la carrera de despegue la velocidad
requerida para obtener sustentación.
12. Despegues.
Cuando un avión
despega, requiere de la máxima potencia para elevar su peso y vencer la
resistencia del aire, por ello, se requiere la longitud de las pistas, la
fuerza ascensional, la fuerza de los motores, todo ello sumado en un solo
impulso, el despegue.
Entonces
empieza el factor aire: a través de efectos aerodinámicos sobre el ala, el
fuselaje y el resto de las partes y de las superficies de control del avión, se
alcanza la sustentación suficiente para levantar la aeronave del suelo, para lo
cual se requiere que las condiciones atmosféricas previas sean convenientes
para conseguir un despegue seguro.
Por último, se mantiene la potencia
máxima en los motores del aparato, se mueven los elevadores o timones de
profundidad y parte de los flaps y se provoca que se levante el morro y, tras
la separación de las ruedas de los trenes de aterrizaje del suelo, el avión
inicie el vuelo.
13.
Va a ser una obra que siempre estará
en reparación. La
fuerza del despegue y el impacto de los aterrizajes van a hacer que el lecho
lacustre, reciba cargas de peso una y otra vez, como un martillo golpeando
sobre una superficie inestable, lo cual va a hacer que las pistas estén en
permanente reparación, sobre todo, si no han sido construidas adecuadamente.
14.
Riesgo de operaciones ante lluvias
constantes. El lago
de Texcoco es una vaso natural, que recibe el agua de lluvias y de ríos de todo
el sistema acuífero de la zona y de la región, por eso se forman los lagos, pero
existen fenómenos naturales que llenan de agua en horas como tonados, ciclones
o huracanes, estos son riesgos mayores.
15. Fuentes
de financiamiento. El
presidente Peña afirmó que se trata de un proyecto autofinanciable, de manera
que se pagará por sí misma, lo que permitirá que quede a cargo del Estado, inversión estimada en más de 120 mil millones de pesos; sin embargo, la corrupción en
la administración más corrupta de la historia de México, pone en duda cualquier
afirmación.
16. Los
proyectos fallidos de Peña Nieto.
El tren a Querétaro, el tren peninsular de Yucatán, estos proyectos no se
comenzaron por falta de financiamiento, ¿Por qué sí este aeropuerto con
asignaciones a empresas fantasmas?
17. El
negocio de las carreteras es que siempre estén en reparación. ¿Se dan cuenta que se construyen
autopistas y carreteras que siempre están en reparación? La causa es
que el negocio es que éstas justo estén en reparación constante, sobre todo en temporada de vacaciones.
En conclusión, esta obra pone no solo
en riesgo los ahorros de las afores, sino que estos van a desaparecer por tres
sencillas razones:
A. La obra es realizada en el peor lugar
posible: el lecho de un lago.
B. La corrupción en México hace que los
costos se disparen.
C. Lo peor es que cuando Odebrecht aparece en la construcción, significa que el dinero bueno se va destinado a empresas
fantasmas, encargadas de robar este dinero para beneficio propio.
Es decir, las afores han perdido su dinero en
una obra que jamás será sustentable y que jamás dará beneficio alguno.